El Gobierno del Estado de Guerrero a través de la Secretaría de Cultura, realizó una convocatoria a la comunidad para pertenecer a la Red Cultural Paz Aporte Guerrero, bajo la premisa de aplicar con iniciativas ciudadanas culturales y artísticas orientadas a la construcción de paz, la convivencia y el sentido de pertenencia.
Debo decir que cuando supe de la convocatoria fue de gran interés para mí, porque:
1.Era una oportunidad para fortalecer las acciones de Proyecto Incendio en el eje de acción del arte,
2.Era un reto,
3.Deseaba hacer un proyecto complejo, que requiriera tiempo, entrega y formación profesional en áreas específicas, para que, quienes me han plagiado en el pasado, tuviesen un mayor grado de dificultad y,
4.La convocatoria tenía cierto aire distinto. Se trataba de una iniciativa que en vez de... (Todos los etcéteras), estaba apostando por el arte y la cultura desde una perspectiva comunitaria en que la inclusión, la calidad y el seguimiento de los proyectos eran una búsqueda real y no sólo un discurso exigido en una ciudad violenta.
A inicios de julio del 2016 recibí la noticia. Mi Programa de Empoderamiento Infantil había sido seleccionado en la línea de acción de "Intervención cultural con niños en zonas de alta vulnerabilidad" de Paz Aporte Guerrero.
Básicamente, se trata de un programa que consta de 5 módulos formativos que se integran y desarrollan de una manera articulada, teniendo al arte como hilo conductor de todo. Luis Vargas Santa Cruz y su servidora, tendremos actividades a lo largo de 4 meses con niños de 7 a 12 años. Cada niño, será evaluado psicológicamente para personalizar el trabajo y potenciar sus competencias, desarrollo integral, autoestima, resiliencia y rendimiento en el programa, sea para trabajar en un proyecto literario, una exhibición de arte contemporáneo o para grabar un videoblog de arte desde la perspectiva infantil.
El Programa de Empoderamiento Infantil "Amat Victoria Curam", parte de dos principios: La victoria ama la preparación y el empoderamiento social puede reducir la vulnerablidad en la infancia a vivir diferentes formas de maltrato (incluido el abuso sexual infantil).
Los niños no sólo toman clases de sensibilización artística, también toman clases de psicología para ser asertivos al comunicarse, para identificar sus necesidades y herramientas de afrontamiento y profundizar en sus procesos creativos. Aprenden a defender sus ideas, a planear proyectos, a desarrollar liderazgo y autoconfianza, pero también a interesarse más en su comunidad, a tener responsabilidad social, hacer sinergia y buscar la sostenibilidad y la autogestión.
Niños que aprendan a ganar las cosas a través del esfuerzo, que crean en sí mismos, que conozcan sus derechos, que creen obras que se conviertan en testigos de su tiempo.
Los alumnos tendrán su propio sistema de economía infantil solidaria, con la cual podrán adquirir arte, ropa y diferentes productos y servicios, esto a fin de que practiquen el trueque, descubran una forma más justa de economía y la hagan parte de sus vidas.
No puedo decir mucho del proyecto aún, pero tenemos gran esperanza en él y vamos a esforzarnos para que el trabajo se desarrolle de manera tal que al finalizar, las ambiciones actuales se queden cortas y los beneficiarios vivan un proceso óptimo de empoderamiento.
Creo que los niños tienen mucho que decir y que la riqueza de su percepción puede ayudar a resignificar el entorno. Que la infancia es una buena etapa de moldeamiento, pero que en Acapulco, debe enfrentar un contexto difícil, ya que las influencias no siempre son positivas.
Gracias a personas maravillosas que creen en el programa y en el trabajo del equipo, han pasado muchas cosas buenas que celebramos. Nos han prestado un espacio de manera indefinida, para crear un centro cultural para niños en la zona tradicional de Acapulco, en el cual podamos impartir el programa de empoderamiento. Poco después, recibimos una importante donación de libros, discos compactos y películas para el acervo cultural. Detrás de esta iniciativa, hay muchas personas, voluntades, ideales, sueños.
Pronto podré contarles más del proyecto. Sólo puedo adelantar que para esta primera edición tendremos un total de 40 beneficiarios, que las clases se impartirán durante las tardes (un grupo de 4 días de clases y otro de 3 días), que parte de nuestra lucha es para que una actividad de este tipo sea de carácter gratuito e inclusivo, y que esta actividad debe ser valorada por todo padre que quiera proteger a sus hijos, que quiera hacerlos más fuertes ante situaciones como bullying, abuso sexual, violencia relacional, baja autoestima, maltrato, etc.
Espero contar con ustedes.
Y ustedes, sin duda, pueden contar con el equipo.